domingo, 29 de agosto de 2010

Sobre el llamado misionero


Últimamente he estado meditando en el llamado o en cómo se desafía a las personas a involucrarse en tareas misioneras.

Me di cuenta que demasiadas veces se pasa por alto o se da como obvio el tema del llamado de Dios. Por ejemplo, esto ocurre cada vez que se invoca el interés o la pasión de la persona (como si se tratara de una ocupación laboral más); o cuando se apela a la valentía personal o a la voluntad de sacrificarse por causa de Cristo (así como otros están dispuestos a dar su vida por Alá o por otra causa).

En mi propia experiencia, confieso que fui influenciado por declaraciones tales como "lo único que se necesita son personas dispuestas"... en mi caso, lo malo fue que yo estaba dispuesto y por eso me involucré cada vez más en tareas y en proyectos de formación misionera, pero no estaba llamado por Dios para ello.

Triste pero cierto.

He resuelto no animar a nadie más para que se involucre en misiones con motivaciones basadas en el hombre. Ya entendí que no se trata del que quiere sino de a quien Dios llama conforme a su misericordia. Esto es lo primero y lo fundamental. Se requiere de una convicción de saberse llamado por Dios y que posteriormente la iglesia confirme este llamado.

Creo que es equivocado pretender que todos son llamados a ser misioneros y que sólo falta la disposición a obedecer.

Pienso que es mejor no identificar el llamado misionero con la mera sensibilidad con la pobreza o con el sufrimiento humano (en la vida presente o en la futura).

Me parece que la alta deserción de misioneros se debe en parte a confusiones en torno al llamado.

Como para seguir desarrollando el tema...

domingo, 22 de agosto de 2010

Increíble pero cierto

Estoy impresionado por la noticia de los 33 mineros atrapados en el Refugio, a casi 700 metros de profundidad, de la mina San José.

Esto me hace pensar en la fe que mueve (o perfora) montañas.

Veo que es difícil establecer el límite entre alimentar esperanzas vanas y alimentar la fe.

Celebro esta hazaña-milagro.

Una vez más encuentro en este caso las dos caras de la moneda: amor al dinero por sobre las personas (por parte de unos) y amor a las personas por sobre el dinero (por parte de otros).

Dios quiera que todos aprendamos mucho de lo ocurrido.





Hoy, 25 de Agosto quiero agregar lo siguiente:

¿Qué habría hecho yo si estuviese atrapado en la mina San José?
¿Habría contagiado a otros con mi fe o con mi desesperanza?
¿Habría adorado a Dios en al adversidad o me hubiese quejado?
¿Le habría predicado el evangelio a mis compañeros o hubiese callado?

Dicen que algunos de los 33 son cristianos. ¿Qué habrán hecho ellos?

lunes, 16 de agosto de 2010

Reacciones a los saludos de cumpleaños

Con esta gracia me saludó Alejandra Pardo, con motivo de mi cuadragésimo primer cumpleaños.
Me gustó tanto que la agregué en este blog. (En la foto que ella usó aparezco mostrando el primer diente que le saqué a Susana).

Un saludo de Facebook que me encantó fue el de Lidia Ortúyar, mi ex alumna del Colegio Gracia y Paz. Aquí va:

Querido, Estimado profesor Bandurria :Z !! jejeje :D ¿Cuando fue la ultima vez que lo vi? [ Uuuuuuuuu mucho tiempo ] ... Estaba jovencitooo, casi un niñito, recién una pequeña avecilla. Pero ahora está ya hecho todo un hoombre con sus hijos y esposa!!, bueno recordando todo esto, también le quiero desear un muy, gran y bendecido Feliz Cumpleaños, que cumpla muchoooooooooooooooooooooooooooos más, que crezcan sus añitos junto a su familia y disminuyan esas canitas jajaja :Z bueno bueno que mas decirle ?! si usted sabe que lo quiero y estimo mucho, ademas que lo echo de menos u_u ... ¡saludos para usted y familia! ... Cuidece mucho y bendiciones !! ...

Recibí hartos saludos y buenos deseos.
Algunos me sorprendieron porque no los esperaba.
Otros me dieron alegría y otros me dejaron pensando.

Gracias a todos.

Agrego estos otros saludos seleccionados, que no me dejan indiferente...

Mi cuñada Angela Mesías Coronado escribió:
Felicidades Santy, oye me estas alcanzando...jajaja. Cómo ha pasado el tiempo...recuerdo ese Santy loquillo que hacía largas caminatas con mis hijos , donde le enseñabas de ecología, recogiendo los papeles de las calles de Quillota, donde les hacías rayar las murallas de tu casa, el que en una bicicleta mini, viejísima llegaste a Quintero desde Quillota , y después a San Bernardo, y veo que los años han pasado y sigues siendo el mismo, lo veo en las vivencias que tienes con tus hijos...me alegro por éso. Los años no han cambiado tu esencia. Daniela hoy de 21 y Diego de 20 . te lo agradecen al igual que yo. te queremos mucho.

Palabras de Jessica Montupil (Escuela Acym Guido Bucher)Feliz cumple, que lo pases muy bien, mxas bendiciones, que los anhelos de tu corazón Dios te los pueda aclarar y mientras tanto a esperar expectante a lo que El te tiene preparado...mxas bendiciones coleguita.


Saludo de Sebastian Barahona (Acym Cavancha) Feliz cumpleaños, pastor Santiago. Mi deseo, más que tenga un lindo día, es que pueda seguir creciendo en fe, amor y en conocimiento de Cristo, que cada día pueda ir recibiendo las verdaderas bendiciones que da Dios a Sus hijos...y que tenga un lindo día ud y su familia :D. Un saludo a todos por allá y ojalá nos podamos volver a ver algún día, si no, en el cielo será. Bless.

sábado, 14 de agosto de 2010

Sobre pastores, ladrones y asalariados


Leamos el siguiente texto bíblico:
Juan 10

Parábola del redil

1 De cierto, de cierto os digo: El que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, sino que sube por otra parte, ése es ladrón y salteador.
2 Mas el que entra por la puerta, el pastor de las ovejas es.

3 A éste abre el portero, y las ovejas oyen su voz; y a sus ovejas llama por nombre, y las saca.

4 Y cuando ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz.

5 Mas al extraño no seguirán, sino huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños.

6 Esta alegoría les dijo Jesús; pero ellos no entendieron qué era lo que les decía.


Jesús, el buen pastor

7 Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas.
8 Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y salteadores; pero no los oyeron las ovejas.

9 Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.

10 El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.

11 Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.

12 Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa.

13 Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas.

14 Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen,

15 así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas.

COMENTARIOS:

Considero que lo más importante de este pasaje es que Jesús se presenta como el buen pastor, que da su vida por la ovejas (Juan 10:11).

Y como tal, Jesús ha de servir de ejemplo para todos aquellos a quienes Él llame a pastorear a sus ovejas.

Recuerdo que hace unos 20 años, en la ciudad de Limache hablé con un hermano en la fe que había vivido bastante tiempo en Suecia. Cuando le pregunté cómo eran un buen pastor en ese país, me respondió al instante: "Un buen pastor da su vida por la ovejas". Me impactó la sencillez y sabiduría de su respuesta, puesto que esperaba que me diera otras características más propias de la mercadotecnia.

Es posible que hubiese bastado que Jesús enseñe sobre el ejemplo positivo del pastor, para explicar su ministerio y orientar a los futuros pastores de su grey, pero no lo hizo así, ya que añadió dos casos negativos.

En efecto, habló de los ladrones y de los asalariados; y los comparó con el verdadero pastor de las ovejas.

Del ladrón dice que no entra por la puerta, que es un extraño, que las ovejas huyen de él, y que no viene sino para hurtar, matar y destruir.

¿Quiénes podrán ser ladrones en el día de hoy?
Los que buscan sacar ganancia de las ovejas. Algunos son abiertamente malvados, pero otros pueden venir disfrazados de verdaderos pastores. Al ser descubiertos en su maldad, las ovejas tienden a huir de ellos.

Del asalariado, Jesús dice: 12 Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa. 13 Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas.

¿Quiénes podrán ser asalariados en el día de hoy?
Los que huyen cuando se enfrentan al lobo. Confieso que antes pensaba que los asalariados eran los que ejercían el ministerio pastoral por dinero, pero desde la semana pasada, creo que el recibir sustento del trabajo con las ovejas no es lo que lo distingue puesto que el pastor también vive de las ovejas, pero sí los distingue su reacción ante el lobo, que puede tomar forma de peligros, persecuciones, fracaso ministerial, o sensación de incompetencia. ¿Y por qué huye? Porque no es el pastor ni son suyas la ovejas.

Aplicación personal:
Mi anhelo es ser un pastor que siga los pasos de Jesús.
Anhelo saberme llamado por Dios al ministerio.
Anhelo vivir lleno del Espíritu Santo.

Me impresiona tener que reconocer que sin saberlo, no he sido más que un asalariado.
Quiero decir que al igual que un asalariado, hice trabajo de pastor (guiando y alimentando a las ovejas) con mi mejor intención, pero sin haber sido llamado por Dios para hacerlo. Esto me quedó claro cuando pensé acerca de mi reacción en los momentos de crisis en el ministerio: mi tendencia era dejar mi cargo a disposición cuando me veía enfrentado a mi impericia o incapacidad. Ingenuamente, creía que al hacerlo, demostraba que no era un asalariado porque no me aferraba a la seguridad económica que me reportaba el ser pastor perteneciente a una sólida corporación evangélica, pero en el fondo lo era porque tendía a huir del lobo, a fin de que otro mejor capacitado tome mi lugar (un verdadero pastor llamado por Dios).

Aclaración final a los lectores:
Ni yo entiendo cómo pude llegar a este punto en mi vida. Pero le doy gracias a Dios que en los últimos 14 meses me haya dado la certeza de salvación y que me haya llevado a cuestionar el llamado que daba por obvio en mi vida, pero cuya ausencia ahora me resulta evidente.

Desde luego creo que en el tiempo anterior Dios me usó según su misericordia, pero anhelo que en el futuro pueda experimentar lo que tantas veces he oído decir y que veo en las Escrituras: Que en el momento de crisis, me sostenga el llamado... a pesar de mis debilidades, faltas o incompetencia. Así sea.

sábado, 7 de agosto de 2010

Reflexiones sobre el LLAMADO

Me están sucediendo cosas maravillosas.
Desde el 3 al 5 de agosto participe de mi quinto Sínodo de pastores de la ACyM, que dicho sea de paso, para mí fue el mejor de todos.

Llegué allá, al recinto de la SIM en Metrenco, con una incertidumbre tremenda acerca de cual es la voluntad de Dios en cuanto a donde o en qué trabajar el próximo año... pero salí del Sínodo anhelando obispado.

Expuse mi caso a otros como motivo de oración, y conversé sobre todo con Andrés Torres y con Israel Morales (mis dos grandes amigos pastores) sobre el tema.

En la primera noche conversé con Andrés hasta las 4 AM. Gracias a ese diálogo comprendí que significa que en momentos de crisis "el llamado te sostiene"; y comprendí que necesito saber si Dios me va a llamar al ministerio o no.

Lo que pasa es que nunca he tenido una convicción profunda de haber sido llamado por Dios al ministerio (tal vez más adelante describa con más detalles esto) de modo que ante los problemas pueda tener fuerza para persistir sabiendo que si Dios me llamó, él me sostendrá.

Por ejemplo, cuando el año 2007 seis hermanos del equipo enviado para abrir la nueva iglesia en Iquique se devolvieron a la iglesia madre, lo primero que pensé hacer fue poner mi cargo a disposición, en vez de luchar o persistir sabiendo que Dios me puso ahí (es que pensaba que lo más honesto de mi parte era asumir mi incapacidad).

Y de manera similar, cuando en octubre del 2009 mis superiores me informaron que tenía que dejar la iglesia hija y el distrito norte grande, de inmediato lo acepté con mucha calma, resignándome a que esa era la voluntad de Dios y punto. Hoy entiendo que mi calma y pasividad se debía a que no me sentía llamado. Por eso ni siquiera pedí una oportunidad (a diferencia de lo que pasó con Ruth). En pocas palabras aparecí como muy sumiso pero en el fondo había también una falta de convicción del llamado (como que podía vivir sin el pastorado).

Como decía, esa noche entendí que debía orar a Dios sobre el llamado y comencé a pedirle que me llame. Esta luz me dejó más tranquilo, y al otro día seguí con esa petición en mi corazón.

Al finalizar el Sínodo se realizó una Santa Cena dirigida por el pastor José Mardones. Durante su realización me di cuenta que yo estaba como nunca antes pidiéndole a Dios que me llame al ministerio y me acordé de lo que dice 1 Timoteo 3:1

"Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea".

Me emocioné al leer eso y me llamó la atención al ver la lista que Pablo incluye acerca de los requisitos que deben reunir los ancianos, pastores u obispos.

Esto es importante porque el ministerio ya no era para mi una opción más sino la opción que anhelo en mi corazón.

Es raro pero es cierto que por primera vez, estoy anhelando el llamado de Dios al ministerio, a pesar de que ya pasé por 4 años en el seminario teológico y por 4 años de experiencia pastoral.