sábado, 24 de diciembre de 2011

Navidad: Tiempo para adorar a Jesús

De acuerdo:  Lo más probable es que Jesús no nació un 25 de diciembre... pero de todos modos, esta celebración que es tradición en nuestra sociedad sirve para proclamar quién es Jesús y a qué vino a este mundo.

De acuerdo: Según la Biblia -en Mateo 2:11- los magos o sabios de oriente no llegaron al establo donde Jesús estaba recostado en un pesebre, sino a su casa en Belén tiempo después... pero tiene valor pensar en la actitud de ellos al buscar al Rey de los Judíos que había nacido.  Ellos lo buscaban para adorarle, y así lo hicieron cuando lo hallaron:
"Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo ADORARON; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra".
Es bueno el ejemplo de estos hombres: buscaron a Jesús y cuando lo encontraron se humillaron físicamente ante Él, lo adoraron y le dieron regalos. Para ellos el centro de atención era solamente Jesús.

Al pensar en cómo seguir los pasos de estos sabios me pregunto cómo fue que lo adoraron.

La Escritura no dice cómo lo hicieron, aunque el postrarse y el darle regalos ya son en sí gestos de adoración.

¿Será que dijeron algunas palabras que expresaron su adoración? ¿Habrán cantado algo? ¿Lo habrán adorado sin palabras audibles?

Sea como haya sido, entiendo que si lo adoraron significa que lo reconocieron no solamente como Rey de los Judíos sino como Dios... y eso me conmueve y me impulsa a hacer lo mismo.

Al meditar en esto, he orado en adoración a Jesús, diciéndole
      Que Él es mi Dios.
         Que no hay otro que le haga sombra.
            Que es el único digno de ser adorado.
               Que sólo hay salvación en sus méritos.
                  Que soy su siervo.
                     Que anhelo hacer su voluntad mientras viva.


No hay comentarios:

Publicar un comentario